El Agua es Vida

El Agua, es un nutrimento en extinción debido a diferentes circunstancias y al mismo ser humano. El despale, las condiciones climáticas, el uso indebido y contaminante que le damos a este vital líquido hacen que nos encaremos frente a una realidad como es la escasez de Agua a nivel global, y sin duda hoy por hoy vemos que en un lugar tras otro es común la crisis del Agua. Para conservar este vital líquido es necesario algo más que las medidas que toman las autoridades en la conservación de la misma; hace falta que cada persona tome conciencia de este problema mundial ya que está en juego la vida de miles de personas.

Algunas recomendaciones serian usar el Agua necesaria a la hora de bañarnos, lavar ropa, limpiar, cerciorándonos que no se dé un desperdicio por goteo innecesario de las llaves, regar las plantas por la noche, etc. Lo indispensable para ello es que se tome conciencia de este problema de todos y que nazca en nosotros la importancia de aportar un granito de arena en la conservación de la sangre de la naturaleza El Agua.

Algo que está en nuestras manos corregir es el desperdicio cotidiano del Agua, y para poder valorar la importancia es necesario recordar que el Agua representa un factor importante en la vida misma del ser humano; dicho de otra manera el Agua es vida y su carencia representa la muerte misma. Cuando el Agua es contaminada con residuos químicos, basura, elementos y microorganismos, esto puede ocasionar diferentes enfermedades e incluso la muerte. Por lo tanto es nuestra propia responsabilidad educarnos en el tema del uso debido y adecuado de este vital líquido y sobre la conservación de nuestros recursos naturales ya que nuestro planeta fue creado como nuestro propio hogar.

Agua para la higiene

Las impurezas pasan de manera constante e invisible a través del cuerpo y se abren camino a través de los poros, por lo tanto si no se mantiene una higiene adecuada para nuestra piel y cuerpo entonces el organismo es cargado con residuos impuros. Si la ropa que usamos no la lavamos de una manera apropiada entonces esta se contamina con las impurezas expulsadas por el cuerpo por medio de la transpiración; por lo tanto el cuerpo vuelve a absorber las impurezas expulsadas. Las impurezas, son llevadas nuevamente a la sangre y forzosamente son introducidas a los órganos enfermos.

El Agua, aplicada externamente es un medio sencillo y eficaz para regular la circulación de la sangre. Los baños calientes calman los nervios, regulan la circulación y abren los poros, ayudando a eliminar las impurezas. Con el Agua, existen muchos remedios caseros sencillos pero eficaces para aliviar el dolor y acortar las enfermedades.

Cuando nos duchamos la sangre es atraída hacia la superficie, circulando con mejor desplazamiento, la respiración se efectúa con mayor facilidad, los músculos se tornan más flexibles, el cuerpo y la mente son vigorizados, el intelecto se agudiza y toda la facultad se despierta, se da una mejor transpiración, evita las obstrucciones en el sistema y beneficia a las vías urinarias. Ayuda al estómago, el hígado y los intestinos, impartiendo energía y una nueva vida a cada uno de ellos. Promueve la digestión y fortalece el organismo, ya que en lugar de pescar un resfriado, un baño tomado de la manera correcta, fortalece el organismo contra el resfrió ya que la circulación mejora. Cuando el útero esta congestionado, el Agua lo alivia porque la sangre es elevada a la superficie, dándose una mejor y regular circulación a través de los vasos capilares.

Una persona con fiebre, reduce el exceso de temperatura, con una adecuada y cuidadosa aplicación de Agua, por lo tanto se recomienda beber bastante Agua para combatir la fatiga tóxica y el metabolismo acelerado que se presentan en la mayoría de las enfermedades. El Agua pura y el aire fresco, vigorizan el organismo, purifica la sangre y a la naturaleza la ayuda a vencer las condiciones perjudiciales del sistema.

El Agua y su Consumo

El  consumo adecuado y necesario de Agua es importante para las distintas funciones vitales que realiza nuestro organismo. 2 ½ litros de Agua, es necesario ingerir para reponer líquidos perdidos, 1 ½ litros perdido por medio de la orina, ½ litro por medio del sudor, ¼ de litro por medio de todas las secreciones y materiales de desecho de nuestro organismo y ¼ de litro acompañadas por las actividades de los pulmones y también el excremento. Hay que tener en cuenta que de los alimentos obtenemos 1 litro, y ¼ litro de la digestión; por lo tanto se necesita 1 ¼ litro para mantener sano nuestro organismo.

El Agua, estimula las funciones del sistema inmune, lo cual execra sustancias toxicas, lo cual asegura que las diferentes células que nos defienden de infecciones estén en óptimas condiciones. El Agua, estimula el orinar con frecuencia y ayuda a evitar infecciones en la vejiga. El consumo regular de Agua, ayuda a controlar el peso ya que calma la sensación de hambre y ayuda a regular el buen funcionamiento del hígado, el cual controla el metabolismo graso. También ayuda a eliminar el exceso de sal.

El poco consumo de Agua provoca serias complicaciones al organismo como la deshidratación ocasionada por diarreas, la cual es una de las principales causas de mortalidad infantil. La irritabilidad o cambio de temperamento se debe a la falta de Agua en nuestro organismo ya que las 40,000 millones de células cerebrales están compuestas por un 70% de Agua, por lo tanto al faltar Agua se pierde la capacidad de pensar de manera clara y funcional. Nuestra vida misma está regida por el Agua, sudamos para regular la temperatura y eliminar toxinas; también mediante el proceso de respiración se pierde Agua.

El Agua es absorbida principalmente en nuestro intestino delgado y el resto en el colon. La sangre compuesta de sangre viaja al hígado y luego viaja hacia el corazón y los pulmones. En el corazón y los pulmones el Agua tiene la función primordial de disolvente, lo cual permite el transporte de anhídrido carbónico de los alveolos a los pasajes bronquiales para ser exhalado trayendo entonces el oxígeno a los alveolos. Esto es posible solo por la disolución de estos gases en un medio líquido. La sangre enriquecida con oxígeno llega al ventrículo izquierdo del corazón siendo luego distribuida por todo el organismo.

De la arteria aorta se desprenden las arterias renales, las cuales se encargan de llevar sangre a los riñones, donde se produce la depuración de sustancias formando la orina. Regularmente se recomienda consumir 2 litros u 8 vasos de Agua diariamente para el buen funcionamiento de nuestro organismo, si se realiza alguna actividad física es necesario consumir mayor cantidad de Agua ya que se pierde mucho más líquido con la secreción del sudor.

El Agua en nuestro organismo

800 vasos de Agua diariamente deberíamos ingerir sino fuera por los riñones. Diariamente el corazón bombea 8000 litros de sangre, de estos, 2000 van hacia los riñones, en lo que cada minuto bombea 5 litros; por lo tanto la sangre pasaría por los riñones unas 400 veces al día. Los tejidos renales y suprarrenales se nutren con esta sangre, 200 litros pasan por las unidades microscópicas de filtración llamadas glomérulos (1.3 millones en total son aproximadamente); sin embargo solo 1 ½ litro son eliminados con la expulsión de la orina, el resto vuelve a ser absorbido en la sangre; estos son los 800 vasos que tendríamos que tomar al día.

Los glomérulos detectan las sustancias de desecho como la urea, la cual tiene que ser eliminada, reabsorbiendo los químicos y minerales que el cuerpo necesita. Hay diversos mecanismos de control, un ejemplo de ello es cuando nos ejercitamos nuestro cuerpo secreta una hormona llamada antidiurética, esta impide que se elimine gran cantidad de Agua que es utilizada en los músculos y otros órganos. Por lo tanto la orina sale mucho más concentrada evidencia clara que es necesario ingerir más Agua.

El buen hábito de ingerir suficiente Agua para nuestro organismo, es muy difícil para muchas personas ponerlo en práctica, por ejemplo algunas dicen que no les gusta su sabor, en este caso el uso de saborizantes puede ayudar. Se pueden elaborar aguas de limón, Jamaica, tamarindo, frutas de temporada o de esencias como el conocido te de limón o el de hojas de naranjo. Se recomienda mezclar poca azúcar, no solo por la cantidad de calorías que contiene sino también por los diferentes efectos negativos que se están descubriendo actualmente; en algunos casos cuando el consumo de azúcar es grande, los efectos negativos son comparados al causado por la grasa de los animales.

Debemos asegurarnos de la pureza del Agua que tomamos ya que de lo contrario estaríamos exponiéndonos a enfermedades intestinales y diarreas causadas por diferente bacterias patógenas, que incluso pueden ocasionar la muerte. Póngase la meta de tomar 8 vasos de Agua diariamente y recuerde que el Agua es fuente de la buena salud.

Es recomendable no ingerir bebidas con las comidas ya que puede alterar el metabolismo digestivo, lo ideal es tomar el líquido antes de las comidas. Si el Agua a tomar es fría, disminuye la sangre de la superficie estomacal, por lo tanto se necesita energía extra para calentarla y colocarla a temperatura corporal, lo cual es necesario para la buena digestión. También es recomendable iniciar cada mañana bebiendo dos vasos de Agua tibia, tomar dos vasos de Agua entre el desayuno y el almuerzo, otros dos entre el almuerzo y la cena y por la noche otros dos.

El Agua

El Agua, es uno de los elementos más esenciales para la vida y por ser un líquido vital, se trata también como un tema de salud que hay que tener en cuenta. En este vital líquido se realizan todas las reacciones orgánicas vitales para la vida. Por medio del agua se llevan las vitaminas, las energías y todos los nutrimentos que el cuerpo necesita.

Nuestro organismo está formado por un 65% de Agua; la sangre está formada por un 95% de Agua, el cerebro por un 85% de Agua y los huesos por un 50% de Agua. Nuestras células contienen y están rodeadas por Agua, por lo tanto el balance de este medio interno y externo, se mide por el paso de ciertos minerales, siendo regulados por un mecanismo llamado presión osmótica. Normalmente el 40% del Agua se encuentra fuera de las células y el 60% dentro de la misma.

Sodio, Cloro y Potasio

Estos tres minerales son electrolitos, que intervienen en la regulación de líquidos corporales. El cuerpo humano está formado por un 65% de agua, pero para que no haya una pérdida considerable de la misma dando origen a la deshidratación, la cual en muchos casos puede ocasionar la muerte, es necesario mantener estable este porcentaje y esa es la función que realizan estos electrolitos.

Otras funciones importantes son el equilibrio osmótico, la irritabilidad normal de los músculos y el balance acido base. El equilibrio osmático es la cantidad de líquido que está presente dentro y fuera de los tejidos. Cuando hay defectos en la regulación osmática, sedan problemas de retención de líquidos como les ocurre a las mujeres embarazadas o la acumulación de líquido en el abdomen de un alcohólico.

Es poco común la deficiencia de estos minerales. Solamente en casos como diarrea especialmente en niños por su rapidez a deshidratarse y en cirugías donde hay pérdida considerable de líquidos.

El Fósforo

Es uno de los componentes minerales más importantes del organismo. Es el sexto elemento más abundante, aproximadamente del 1.5% de Fósforo, está formado el ser humano. Es un macromineral o sustancia mineral de la cual necesitamos cien miligramos o más al día.  Se encuentra principalmente en alimentos con proteínas como la carne, huevo, leche, cereales y leguminosas.

En el organismo humano cumple con una gran cantidad de funciones; cada célula que forma el organismo se encuentra limitada por una membrana, la cual está formada por proteínas y fosfolípidos. El Fósforo, es lo que permite que muchas sustancias esenciales para las células, puedan traspasar la membrana celular. La memoria biológica de los seres vivos, se encuentra almacenada en los ácidos nucleicos, básicamente en el ácido desoxirribonucleico (ADN) y el esqueleto. El Fósforo, también forma parte de la estructura que sostiene a los ácidos nucleicos.

El esqueleto óseo contiene un buen porcentaje de Fósforo. La combinación del Fósforo y el calcio forman un mineral llamado hidroxiapatita, el cual es el principal componente inorgánico de los huesos. La participación del Fósforo, es notable en el metabolismo energético. El Fósforo, interviene como cofactor enzimático en reacciones que intervienen los macronutrimentos, los cuales nos proporcionan energía.

La deficiencia de Fósforo, ocasiona un aumento en la susceptibilidad a infecciones, debilidad en los huesos, disminución del apetito, obesidad, confusión, debilidad muscular, anemia y puede llegar al grado de ocasionar un coma. La biodisponibilidad del Fósforo, o la absorción respecto a lo que comemos, es alta, por lo tanto su deficiencia es poco casual.

El Fósforo, y la importancia de sus funciones en el organismo, hace que el cuerpo cuente con mecanismos que aumentan o disminuyen su excreción y absorción; ejemplo: El Fósforo, sobrante se elimina por la orina, lo cual es muy importante ya que este exceso puede provocar complicaciones al organismo.

El Calcio

Este mineral al igual que el fósforo, pero a diferencia del hierro, es uno de los llamados macro minerales. Aproximadamente el 2% del peso total de nuestro cuerpo es Calcio, por lo cual representa un 39% del total de elementos del organismo. El Calcio, conjuntamente con el fósforo, forma una estructura cristalina llamada hidroxiapatita, que es la que se encarga de dar estructura a los huesos.

El Calcio, participa en la conducción de estímulos nerviosos. Las células nerviosas se comunican a través de impulsos eléctricos, pero para que esto sea posible deben existir cargas eléctricas diferentes a cada lado de la membrana celular y es en este proceso donde interviene El Calcio; Los iones negativos que participan en este proceso son de Calcio.

El Calcio, también interviene en la conducción miocárdica, coagulación de la sangre, contractilidad muscular y en la hematopoyesis, el cual es un proceso mediante el cual se forma la sangre en la matriz ósea de los huesos largos.

Las concentraciones de Calcio, mas importantes se pueden encontrar en las carnes, mariscos, pescados, y en productos lácteos como queso, leche y yogurt. Una deficiencia de Calcio, puede traer muchas complicaciones relacionadas con anormalidades óseas en los huesos como el raquitismo, la osteomalacia y la osteoporosis. Otra complicación por deficiencia de Calcio, es el aumento de la presión arterial, lo cual genera el desarrollo de la hipertensión arterial; sin embargo esto puede controlarse ingiriendo cantidades adecuadas del mineral faltante.

Para prevenir muchas complicaciones debido a la deficiencia de este mineral, es recomendable consumir alimentos ricos en Calcio, siempre teniendo en cuenta que hay momentos que se necesita un porcentaje mayor del mineral, sobre todo en la etapa de crecimiento del niño y durante el proceso de embarazo.

El Magnesio

Este mineral es importante porque interviene en la regulación del equilibrio, ayuda a reforzar el buen funcionamiento del corazón y el funcionamiento muscular, interviene en la formación de huesos fuertes. Cuando se toma con vitaminas C, D, fosforo, calcio y proteínas, entonces su aprovechamiento es mayor. Hay que tener en cuenta que el alcohol es una sustancia que lo neutraliza.

El Magnesio, Se encuentra en los cereales y derivados como la harina de maíz, el pan integral de trigo, etc., también se puede encontrar en los huevos, queso y leche; en frutas y verduras como el repollo, zanahoria, tomate, plátano, sandia, naranja, piña, etc., también en las carnes y pescado.

Su deficiencia se vincula principalmente a la presencia de enfermedades cardiacas, pérdida de control muscular, cálculo en las vías urinarias, y calcificación de los vasos sanguíneos.

El Cobre

El Cobre, es un mineral esencial ya que participa en la formación sana de glóbulos rojos. Su concentración la encuentras en la mayoría de las harinas, tomate, soya, papa, chayote, berenjena, uvas, manzanas, naranjas, productos lácteos y también en las carnes y pescados. El Cobre, ayuda a la asimilación corporal de la vitamina c y participa en el mantenimiento de un tono y respuesta musculares saludables.

El hierro

Este mineral es esencial para la regulación del metabolismo de las proteínas, formación de hemoglobina en la sangre y mioglobina en el tejido muscular. Participa en la capacidad de resistencia a las infecciones y al virus de la gripe. Este mineral se encuentra en verduras como el tomate, repollo, lechuga, etc. En frutas secas como el maní y también en alimentos como el pescado, carnes, huevo, leche, pan integral de trigo, soya y maíz.

El organismo aprovecha mejor el hierro, cuando se combina con otros minerales como el fosforo y el cobre. Algunas sustancias pueden neutralizar la absorción del hierro, como el café y la ingestión excesiva de fósforo y zinc. Una deficiencia de hierro, puede provocar resfriados frecuentes, estreñimiento, fatiga, anemia, dificultades respiratorias, uñas quebradizas y débiles.

El Yodo

El Yodo, es esencial en la regulación hormonal de la glándula tiroides; también para la buena apariencia de un tono de piel saludable, así como ayudar a fortalecer a los dientes, uñas y cabello. Hay muchos elementos que contiene este mineral, pero la mayor concentración se da en el pavo, sal yodada, salmón, algas marinas y aceite de pescado. Su deficiencia causa retraso mental, palpitaciones cardiacas, uñas quebradizas, obesidad, nerviosismo, cabello seco opaco, resequedad en pies y manos.

El Zinc

Este mineral es esencial para el crecimiento, ya que participa en funciones biológicas muy importantes como la síntesis de proteínas, también en el metabolismo de carbohidratos, siendo parte de las enzimas que interfiere en el metabolismo. El Zinc, interviene de manera significativa en la producción de colágeno, la cual es una proteína que se encuentra en la piel y es importante en la regeneración y curación de quemaduras, escaras en la piel, etc.

Este mineral se puede encontrar en alimentos como mariscos, huevos, leche y carne; también en vegetales pero en poca cantidad y su absorción es deficiente por la presencia de fibra y otros minerales que impiden su absorción como ocurre con el calcio. El aumento de Zinc, también depende de los utensilios que se utilicen para su preparación ya que algunos pueden aumentar su concentración como los utensilios de metal galvanizado.

La deficiencia de Zinc, pude causar una talla baja, retardo en el desarrollo sexual y enanismo, por lo tanto la alimentación diaria durante la etapa de crecimiento debe de estar acompañada de alimentos con bastante concentración de Zinc. Una deficiencia de Zinc, repercutirá en el crecimiento y desarrollo del niño.

La Vitamina K – filiquinona

Esta vitamina liposoluble, realiza la función de coenzima en múltiples reacciones en el metabolismo; siendo esencial para el buen funcionamiento del hígado. Forma parte de la importante proteína La Protrombina, la cual interviene en la coagulación de la sangre.

La Vitamina K, se encuentra en la zanahoria, tomate, lechuga, calabaza, repollo, soya, naranja, plátanos, carne, huevos y productos lácteos. La Vitamina K, se forma en nuestro cuerpo por síntesis bacteriana intestinal; por lo tanto una destrucción de la flora bacteriana, por ejemplo una terapia de antibióticos a largo plazo puede generar un escaso nivel de la Vitamina K, también por deficiencia de proteínas o por la deficiencia de absorción de la Vitamina K.

Esta vitamina por ser liposoluble, necesita de la combinación de la grasa, por lo menos de 1 cucharadita de aceite vegetal. Otro factor muy importante es consumir alimentos de origen animal como el huevo, leche y carne, ya que estos alimentos contienen algo de grasa.

La Vitamina E – filiquinona

Esta vitamina tiene como función esencial, influir como antioxidante, trabajando como una barrera protectora en las membranas de las células, lo cual hace que no envejezcan ni se deterioren. Esta función antioxidante es muy esencial en la prevención y mejora de problemas como fibrosis de seno, tromboflebitis, esterilidad masculina, aborto espontaneo, toxemia del embarazo, isquemia cardiaca y traumas donde se da una destrucción de células importantes. La Vitamina E, se encuentra en frutas y verduras como el plátano, naranja, zanahoria y repollo. También se encuentra en aceites de germen de trigo, maíz, soya y girasol. Por otra parte se encuentra en la leche y en los chocolates.

La Vitamina E, es liposoluble por lo tanto para ser absorbida en el intestino, es necesario que se encuentren presentes las grasas; por lo tanto es necesario que diariamente se consuma una cucharadita de aceite, esto con el objetivo de cubrir las necesidades de ácidos grasos esenciales y para poder absorber esta vitamina. La deficiencia de esta vitamina, puede darse por dos factores: la primera es que no se consumen los alimentos necesarios que la contienen y el segundo factor es que hay una mala absorción de las grasas.

La Vitamina D – colecalciferol

Esta vitamina interviene en la formación y desarrollo de dientes y huesos, además de mantener sano el sistema nervioso y también facilita la coagulación normal de la sangre. Es necesaria para la asimilación de calcio, fósforos y proteínas, además de contribuir al pleno funcionamiento de la tiroides.

Al haber deficiencia de esta vitamina en los niños, provoca ratiquismo, la cual es una enfermedad que desarrolla malformación y desmineralización de los huesos y en los adultos, osteoporosis la cual causa debilitamiento de los huesos con el riesgo de fracturas óseas. Hay que recalcar que la Vitamina D, es muy importante en la etapa de crecimiento, ya que una deficiencia de ella, provoca una estatura no deseada en el adolescente, de igual manera influye directamente en el mal crecimiento de los dientes.

En el consumo de la alimentación diaria debe encontrarse la Vitamina D, la cual se encuentra presente en el plátano y en alimentos de origen animal como el atún, queso, huevo, hígado, pollo, leche, etc. Un aspecto muy importante que debes tener presente es que debes exponerte al sol durante unos 15 minutos diarios, ya que los rayos del sol transforman directamente a los precursores de esta vitamina, en una Vitamina D, activa. En zonas tropicales la deficiencia por Vitamina D, no es problema, en cambio en lugares fríos y de poca a fluencia a los rayos del sol, es más frecuente los casos de raquitismo.

La Vitamina C - ácido ascórbico

La Vitamina C, es muy importante porque fortalece los vasos sanguíneos, influye directamente en la formación y mantenimiento de encías, dientes y huesos sanos. Es indispensable para la formación de colágeno, proteína necesaria para la cicatrización de heridas y cura de quemaduras. Ayuda a asimilar el hierro y a la resistencia general del cuerpo ante las infecciones; siendo parte de las sustancias que unen a las células para formar tejidos.

Esta vitamina se encuentra en frutas como la papaya, piña, mango y guayaba; en cítricos como el limón, naranja, y toronja; en verduras como la calabaza, repollo, chayote, tomate y el chile; también se encuentra en las hortalizas de hojas verdes. En cambio otros alimentos la contienen pero en menor porcentaje como los cereales, leche y la carne.

El contenido de la Vitamina C, varia en las frutas y verduras, por ejemplo cuando están verdes su contenido es bajo, cuando están maduras su contenido está en su punto, pero cuando están remaduras su contenido vuelve a bajar. La Vitamina C, se pierde cuando tiene contacto directo con alcohol etílico, por ejemplo al combinar limón con cualquier tipo de licor. También se pierde cuando la Vitamina C, entra en contacto con el aire, oxidándose, por eso es recomendable que al preparar jugos se ingieran de inmediato.

La Vitamina B12 – Cianocobalamina

La Vitamina B12, forma parte del complejo B, siendo un grupo de vitaminas muy importante ya que participa directamente en diversos procesos metabólicos y del sistema nervioso. Regula el funcionamiento normal del tracto gastrointestinal, ayuda a mantener sana la piel, los ojos, el cabello y el hígado.

La mejor fuente de Vitamina B12, la obtienes de los riñones, el hígado, carne magra, queso, pescado y el huevo, también se encuentra en el maíz, en todos los productos lácteos y carnes. El 70% de Vitamina B12, se pierde al momento de la cocción de los alimentos; también del 40% al 90% de la vitamina se pierde cuando la leche es pasteurizada y evaporada. Al ingerir vegetales estos se fermentan en la parte final del intestino, produciendo un buen porcentaje de Vitamina B12, sin embargo esta no se asimila ya que este no es un lugar de absorción del organismo.

A quedado patente en diferentes estudios que niños amamantados por mujeres vegetarianas presentan deficiencia de  Vitamina B12, ya que las principales fuentes de esta vitamina provienen de los alimentos de origen animal. Las consecuencias de deficiencia de Vitamina B12 se presentan de diferentes maneras como nerviosismo, poco apetito, anemia perniciosa, cansancio y falta de color en la piel.

El exceso de Vitamina B12, se expulsara por la orina. Los diversos minerales en el organismo llevan a cabo funciones muy importantes para la vida una deficiencia de ellos puede traer malas consecuencias en el estado de nutrición y por ende en el crecimiento.

La Vitamina A - retinol

La vitamina A, influye directamente en la visión, en los procesos inmunitarios que evitan las infecciones, desarrollo de los huesos, dientes, crecimiento, mantenimiento del tejido epitelial ( pelo, uñas, piel, mucosas respiratorias y de los ojos etc.) Es un componente de los pigmentos visuales, encargados de una adecuada visión.

La vitamina A, influye directamente en el crecimiento de los niños, ya sea en una estatura baja o en el desarrollo psicomotor. Se puede encontrar en alimentos de origen animal como el huevo, leche, mantequilla, queso, hígado, etc. También se encuentra en carotenoides en las frutas y verduras (zanahoria, apio, repollo, chiltoma, piña, naranja, papaya, etc.)

Una deficiencia de la Vitamina A, puede provocar desde ceguera nocturna hasta perdida de la visión, también predispone a infecciones tanto de las vías respiratorias como de las gastrointestinales.

Para que los alimentos que contienen la Vitamina A, nos aporten la mayor cantidad de esta, es importante conocer que el conocimiento leve de los alimentos que contienen carotenoides como retinol, precursores de la Vitamina A, favorece su biodisponibilidad, pero un conocimiento excesivo puede destruirlos. La deshidratación de alimentos como la zanahoria, brócoli y espinacas, reduce la cantidad de carotenoides, por lo tanto es recomendable consumir verduras frescas para aprovechar al máximo los nutrimentos.

Los carotenos y el retinol de los alimentos  son liposolubles. Esto significa que al freir los alimentos deberíamos consumir también el aceite ya que la Vitamina A, ha quedado disuelta en el mismo. Un exceso de Vitamina A, se almacena en el hígado.

La Sal

El condimento universal de nuestra alimentación La Sal, ha tenido un aumento en el nivel de consumo, siendo este aumento un alerta de peligro para la salud. Los componentes principales de la sal son el cloro y el sodio (cloruro de sodio), estos son indispensables para la vida, pero el consumo excesivo de la misma  puede provocar problemas serios de salud como la retención de agua (edema), enfermedades del corazón, problemas renales, hipertensión arterial, etc. Para reducir el consumo de sal no basta con echar menos sal a los alimentos, sino también leer la preparación de los envases para determinar si estamos ingiriendo más sodio del que creemos.

La principal causa del exceso de consumo de sal ha sido que la mayoría de las personas no a aprendido a disfrutar del sabor original de cada alimento. Se puede disminuir el consumo de sal de la siguiente manera:

1.  No poner el salero en la mesa.

2.  Disminuir el consumo de embutidos.

3.  En vez de pan preferiblemente consuma tortillas ya que se elabora con sal.

4.  Evitar el consumo de productos industrializados.

5.  Disminuir o excluir de su alimentación carnes saladas o ahumadas, ejemplo: machaca, 

     cecina, bacalao, etc.

6.  Disminuir el consumo de productos salados como palomitas de maíz, papas,
     cacahuates, etc. 

7.  Evitar el uso de polvos de hornear, mayonesa, margarina, mantequilla con sal y otros 

     aderezos para ensaladas.

Es sumamente importante recordar que el consumo excesivo de algún componente de la dieta, siempre habrá un peligro inminente para la salud aunque a corto plazo no se note.

Frutas y Verduras

La principal fuente de vitaminas, minerales y fibra provienen de las frutas y verduras. Al consumir las frutas de cada temporada aseguramos, primero el aporte de todas las vitaminas y minerales necesarias; segundo al consumir frutas y verduras por temporada no nos empachamos por así decirlo, y por último por ser la temporada se encuentran a precios accesibles. Se pueden consumir como mermeladas, jaleas, jugos, puré y cocidas, pero principalmente debe procurarse el consumo crudo o semicrudo, para que no desaparezcan algunas vitaminas y minerales esenciales. Antes de ser consumidas crudas deben ser lavadas muy bien. Es recomendable ingerirlas con todo y la cascara ya en ella se encuentra la mayor cantidad de fibra.

Es recomendable tomar los jugos o ensaladas inmediatamente después de preparadas ya que de esta manera se evita la destrucción de algunas vitaminas cuando estos entran en contacto con el aire (oxidación). La calidad de las frutas depende de su grado de madurez, entre más madura mayor es la cantidad de vitaminas y tiene mejor sabor. Las frutas son un alimento regularmente necesario en nuestra dieta alimenticia y no debe considerarse como un postre que se come por antojo o de vez en cuando. Es importante recordar que la fruta debe consumirse totalmente sola sin la combinación con otros grupos de alimentos, ya que entre mayor mezcla de alimentos, mayor es el grado de dificultad en la digestión.

Azúcares y grasas

Al grupo de alimentos de azúcares y grasas se une la crema, mantequilla, margarina, manteca, crema, aceite, azúcar de mesa, refrescos, dulces, leche condensada, etc. Este grupo de alimentos debe ser consumido de manera limitada.

Referente a las grasas es mejor seleccionar para el consumo y preparación de alimentos, los aceites de origen vegetal y por lo tanto reducir o excluir por completo los aceites de origen animal que aunque dan un sabor diferente a los alimentos, deben ser utilizados con moderación ya que estos contribuyen al desarrollo de enfermedades cardiovasculares. 

Alimentos de origen animal y las leguminosas

Este grupo de alimentos nos proporciona principalmente las proteínas. A este grupo se unen las carnes de res, cerdo, pescado, aves, etc., además el huevo, la leche y sus derivados, excepto la crema, mantequilla y la leche condensada. Las carnes y los alimentos de origen animal aportan al organismo vitaminas, proteínas y minerales, resultando muy esenciales en la etapa de crecimiento del ser humano. Otros alimentos de origen animal son ricos en grasas como las carnes grasosas, la piel de aves, embutidos, etc., este tipo de alimentos no debe formar parte de nuestra alimentación diaria, antes bien deben ser consumidos de vez en cuando.

Las leguminosas como la soya, las habas, los garbanzos, la lenteja los frijoles, etc., nos proporcionan proteínas y además carbohidratos, minerales, vitaminas y fibras. La combinación de los aportes de los cereales y las leguminosas del grupo de alimentos anteriores, pueden sustituir a los alimentos de origen animal en la dieta.